No Matarás Al Vecino (a no ser que sea un demonio): "Posesión Infernal: El Despertar" (2023)

Hoy nos adentramos en "Posesión Infernal: El Despertar" (2023), reinicio de la franquicia de Posesión Infernal dirigido por Lee Cronin y producido por el trio detrás de la trilogía clásica, Sam Raimi, Rob Tapert y Bruce Campbell.

Si hay una película que agradezco haber visto en mi adolescencia es, sin duda, "El Ejército de las Tinieblas" (1992). La tercera cinta de la trilogía "Evil Dead" es clave porque fue la que encendió la chispa que hizo que, con 16 años, me interesara por el cine de terror y fantástico, aunque llevaba ya algunos años viendo películas, sobre todo clásicas ("Tiempos Modernos", por ejemplo, fue una película que ví con 12 años). Por ello y por la cantidad de veces que he revisionado la saga con el paso del tiempo, me declaro fan absoluto de la saga, siendo incluso admirador del remake de Fede Álvarez (un triunfo en reinterpretar la historia) y la serie, que es de visionado obligado para cualquier fanático del terror y la comedia.

Cuando me enteré de que se estaba preparando un reinicio de la franquicia, intenté no dejar que esa ola de toxicidad y negativismo tan típica de las redes sociales se apoderara de mi. Teniendo en cuenta de que Raimi, Tapert y Campbell estaban produciendo la cinta y habían dado su visto bueno, evité caer en la ceguera de criticar un producto únicamente por pertenecer a una IP que amas. Al parecer, esta película iba a estrenarse directamente en HBO Max (si, como oís), pero, después de los pases de prueba y viendo las reacciones del público, decidieron llevarla a la pantalla grande. La jugada les salió redonda ya que, a día de hoy, lleva casi 140 millones de dólares en taquilla. Teniendo en cuenta que la cinta costó poco menos que 20 millones, estamos hablado de un éxito comercial indiscutible.

"Posesión Infernal: El Despertar" se separa del resto de películas de la saga por enfocar la narrativa en un bloque de edificios casual, sin ser una cabaña en el bosque, localización tan icónica como cliché a estas alturas del partido. La referencia a la cinta italiana "Demons 2" es indiscutible, pero es una mera coincidencia (¿u homenaje?). Este cambio de localización nos permite ver elementos nuevos añadidos a la historia, que hacen que sea una experiencia distinta y un viaje muy entretenido. Quizá el elemento que una a todas sea, como es evidente, el Necronomicón, que añaden un aura religiosa en esta cinta que le queda de maravilla.

Otro elemento que aporta frescura a esta cinta y la diferencia de las demás es la inclusión de una familia como elemento principal de la historia. En el resto de la franquicia, los protagonistas solían ser un grupo de amigos y eran uno a uno los que iban siendo poseídos por esa fuerza sobrenatural. Sin embargo, aquí la primera en ser poseída es la madre de la familia, que permite mostrarnos escenas de puro terror psicológico e incluso tintes de humor negro que hace que el personaje de Alyssa Sutherland sea, probablemente, la "deadite" más memorable junto a Henrietta en "Terroríficamente Muertos". 

Además de todo lo previamente mencionado, es una película tremendamente entretenida. Su montaje y fotografía son excelentes, aprovechando cada rincón del hogar de la familia para crear situaciones terroríficas (con sus chorros de sangre tan característicos de la franquicia). Uno siente viendo la película que el equipo detrás de la cinta admira el trabajo de la original y de muchas películas icónicas del género, ya que tenemos momentos que evocan a otras grandes cintas. No diría que es "fan-service" pero si hay pequeños homenajes que no afectan a la trama pero son altamente disfrutables, especialmente cuando uno se pone a investigar y a leer acerca del rodaje de la película. 

Respecto a aspectos de la película que son meramente personales, si es cierto que la cinta evoca más al remake de 2013 que a la trilogía original. Aquí lo que ha hecho Lee Cronin es hacer un crisol del remake y la trilogía original, pero sigo echando de menos una "mijita" más de ese humor absurdo y momentos puramente "camp" y exagerados que hacían de la trilogía original un disfrute. No es algo que afecte en absoluto a su visionado, sino más bien una opinión personal. Además, la banda sonora no resulta tan memorable como las de sus predecesoras (aunque muy efectiva en el visionado de la cinta).

En definitiva, Posesión Infernal: El Despertar es una película fresca, entretenida y muy disfrutable que es indispensable verla en pantalla grande. Una experiencia terrorífica digna de sus predecesoras y que tiene tanta sangre, demonios cabrones y sustos como esperábamos, aportando elementos nuevos a la trama pero sin olvidar sus raíces. A pesar de ser de un estudio enorme como Warner, no olvida sus orígenes en la serie B y los acoge con los brazos abiertos. En pocas palabras, "all killer, no filler".

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