"The Toxic Avenger" (2023): El TROMAnecimiento en estado puro #JaviOcañaEnSITGES2023
Hoy nos adentramos en The Toxic Avenger, remake homónimo de aquel clásico ochentero de la Troma que supuso el hit definitivo para la productora. Un remake con mucho encanto y que brinda un apartado artístico diferente en comparación a su predecesora.
He de confesaros que, a medida que ha ido pasando el tiempo, mi apatía frente a los remakes se ha ido diluyendo. Más que nada porque, poco a poco, el cine me ha ido demostrando que, siempre que haya una visión artística meritoria de apreciar y una voluntad por aportar ideas nuevas a una IP establecida, pueden ser un tandem perfecto frente a su original o incluso superarla en algunos aspectos. Por ello, en cuanto anunciaron que Legendary Pictures iba a producir un remake de El Vengador Tóxico, no decidí tirarme al carro de la negatividad y esperé, con curiosidad, que iban a realizar con esta IP legendaria.
Desgraciadamente, en el momento en el que os escribo estas líneas, The Toxic Avenger no tiene distribución en España. Yo tuve una oportunidad de oro y pude verla durante mis tres días en el Festival de Sitges, en un pase que jamás olvidaré. Fue en el Auditori, la sala más grande, que cuenta con una pantalla enorme y una capacidad para casi 1.000 personas. Se dió antes de la proyección el premio Máquina del Tiempo a Phil Tippett, legendario artista de los FX artesanales y digitales, que nos "deleitó" con uno de sus famosos y largos discursos. Si has estado en Sitges este año y no te has comido una masterclass de Tippett, ¡¿donde has estado?!
Vamos allá con la película en cuestión. The Toxic Avenger está dirigida por el actor Malcom Blair, al cual vimos como co-protagonista en la última producción de Nolan, Oppenheimer (y de la cual tenéis reseña aquí). La protagoniza Peter Dinklage junto a un reparto de secundarios de ensueño como Kevin Bacon y Elijah Wood. Se separa muchísimo de su predecesora salvo por ese punto de partida de un hombre que cae en residuos tóxicos y se convierte en el antihéroe definitivo. Tal vez eso eche para atrás a muchos y muchas, pero considero que la película de 1984 es un producto de su época y tratar de recrear la película de la misma forma hubiera sido un error por parte del equipo creativo.
The Toxic Avenger se desarrolla como una comedia fantástica con un tono over-the-top y tontorrón que le va como anillo al dedo. La primera muerte que presenciamos ya es una declaración de intenciones de lo que vamos a ver en toda la película. En su tramo inicial, se puede observar un esfuerzo en crear un universo bizarro pero muy bien ambientado, con un apartado artístico bastante memorable (sobre todo por esos antagonistas que parecen villanos de dibujos animados). Se echan de menos los efectos prácticos en cuanto a sangre, pero se agradece que Toxie haya sido recreado con maquillaje.
La trama se desenvuelve en una cadena de gags y momentos hilarantes que, como el terror, dependen de la sensación que causen en el espectador. A mí me consiguió sacar muchas risas y fue una película que disfruté inmensamente, por ese mamarracheo y disfrute que genera. No han tratado de adaptarla de manera seria y tiene una sensibilidad de serie B encantadora.
En definitiva, para mí The Toxic Avenger es la perfecta re-adaptación del clásico de culto. Una visión única y diferente que brinda al mítico personaje de un estilo cuasipunk en una película divertídisima y que cuenta con un ritmo imparable. Deseando ver que piensan el resto de fanáticos y fanáticas del personaje pero, bajo mi punto de vista, estamos ante un remake más que digno que merece todo el cariño de los fanáticos del género.
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